El personal de apoyo del hospital ha jugado un papel vital durante la pandemia
DALLAS – No todos los héroes de la salud son parte del equipo médico o de enfermería. Detrás de ellos se encuentra el personal de apoyo de Parkland Health & Hospital System, el cual brindaservicios esenciales para ayudar al equipo médico de COVID-19 a tratar a los más enfermos.
Amas de llaves, ingenieros y trabajadores de mantenimiento, intérpretes médicos, farmacéuticos, personal de nutrición, entre otros, han trabajado junto a los cuidadores durante el largo y difícil año desde que llegó el virus SARS-CoV-2 a Dallas.
“Cansancio, emoción y frustración” son tres palabras que utilizaron los trabajadores que apoyaron directamente a las unidades COVID de Parkland para describir sus sentimientos el año pasado. A pesar de los turnos difíciles, tienen la esperanza de que este virus pronto estará bajo control y se reanudará la vida “normal”, gracias al lanzamiento de las vacunas. El reciente cierre de las unidades COVID-19 de Parkland es un hito importante en ese viaje hacia la normalidad.
“Este año ha sido impredecible y, en ocasiones, agotador emocionalmente,” dijo Alejandra Hernandez, intérprete médica en Parkland. “Es increíblemente difícil lidiar y presenciar la pérdida de un paciente a causa de la pandemia, pero también es un recordatorio por qué estamos aquí, para ayudar al paciente y su familia en un momento difícil.”
Uno de los héroes anónimos que ayudó a combatir la pandemia en Parkland hizo visitas virtuales con los médicos en las unidades COVID del hospital para ser intérprete de los pacienteso f familiares.
“Una llamada particularmente difícil que recuerdo fue tener que interpretarle a una mujer que solo hablaba español que su esposo no se encontraba tan bien. La parte más difícil fue tener que escucharla compartir recuerdos de él y decirnos quién era él como persona. Llegas a conocer al paciente a través de estas conversaciones.”
Durante muchos meses, Jacquelyn Richmond, una técnica de servicios ambientales, recorrió los pasillos de la unidad de COVID-19 del piso 16 de Parkland todos los días para asegurarse de que todas las salas de descanso, baños, salas de nutrición y salas de guardia estuvieran limpias y para el personal. También limpia y desinfecta las habitaciones después de que un paciente con COVID reciba el alta.
Richmond es una de siete técnicos que se ofrecieron como voluntarios para continuar trabajando en su área designada incluso cuando se convirtió en una unidad de COVID a medida que aumentaba el número de casos en Parkland. También tenía un mayor riesgo de contraer una enfermedad grave por el COVID-19 debido a una afección médica.
“Me quedé para poder ser solidario,” dijo Richmond. “Una cosa que esta pandemia nos ha enseñado es que cuando llega una crisis, nos unimos como equipo. Estábamos allí para protegernos unos a otros.”
“Todo el mérito es para mí personal. Estábamos preparados y listos para comenzar,” dijo Feodor Plair Jr., gerente de operaciones del departamento de Servicios Ambientales de Parkland. “No me sorprendió que Jacquelyn, junto con otros miembros de mi personal, se ofrecieran como voluntarios para seguir trabajando en el piso 16. Me sentí aliviado, feliz y emocionado con la forma en que el personal tomó la noticia.”
Antes de COVID, Richmond estaba acostumbrada a tener conversaciones con los pacientes durante su turno. A ella le gustaba ver cómo estaban o simplemente ofrecerse a ayudar a enchufar el cargador de su teléfono. Ese no fue el caso esta vez. “Caminé por los pasillos y vi a los pacientes a través de la ventana acostados boca abajo. Esta vez, no puedo entrar en la habitación, pero me aseguré de al menos decir una oración,” dijo.
Los miembros del personal como Richmond, Plair y Hernandez son solo tres de los muchos empleados de Parkland que no han sido el centro de atención por su trabajo durante la pandemia de COVID-19, pero su compromiso y contribución para combatir el virus nunca pasaron desapercibidos para los altos directivos de Parkland.
“Se necesita a todos en el hospital para brindar la mejor calidad de atención,” dijo Joe Chang, MD, director médico de Parkland. “Trabajar durante la pandemia ha sido muy difícil para nuestro equipo médico y de enfermería, quienes tratan a pacientes infectados con COVID-19.
Sin embargo, nuestras amas de llaves, intérpretes y cientos de personas más en Parkland han trabajado igual de duro y han sufrido mucho. Estas personas son los héroes anónimos de Parkland y merecen todo el crédito posible. Estamos orgullosos de su arduo trabajo y dedicación durante estos meses.”
“Este año me ha demostrado lo fuerte que es nuestro personal,” dijo Plair. “Son personas que no alardean. Simplemente están haciendo lo que están llamados a hacer. Puedo decir que hemos logrado mucho.”
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